Osasuna Magna 2-2 Movistar Inter // Reparto de puntos entre navarros y madrileños en un Anaitasuna entregado a la causa. Con este empate, aprovechando la derrota de Levante y a la espera de lo que haga el Barça, ambos son colíderes de la clasificación (Foto: Osasuna Magna).
El feudo pamplonica, que por primera vez en este curso se quedó pequeño, pudo disfrutar de un espectacular encuentro entre Osasuna Magna y Movistar Inter. Dos equipos que, tras el empate, continúan invictos en este comienzo de campeonato. Este hecho, unido a la derrota por 4-3 de Levante en la casa de Palma y a que el Barça debe jugar el derbi catalán en Santa Coloma frente a Catgas, posibilita que tanto los de Arregui como los de Velasco se hayan ido a dormir comandando la tabla clasificatoria.
Comenzó mejor Xota, con mucha más intensidad en sus acciones. A pesar de que Inter intentaba coger las riendas en el juego, eran los locales los que tenían más ritmo en su juego. Fruto de esto llego el primer gol de la noche, obra de Víctor Arévalo.
Con el 1-0, Osasuna comenzó a esperar en media cancha. También porque se vieron obligados por el hecho de que los de Velasco desplegaron sus mejores minutos sobre la pista azul de Anaitasuna. El premio lo encontró Rafael, que en una excelente acción individual logró el empate provisional.
Reaccionó rápido Osasuna Magna, que llevó el choque al descanso con 2-1 en el electrónico, gracias al tanto de Roberto Martil que, de cabeza, culminó una acción ensayada de saque de esquina.
En la segunda mitad, los de Arregui continuaron teniendo las ideas más claras ante un Inter que en apenas siete minutos ya había cometido las cinco faltas. Con pocas ocasiones en ambas porterías, fue Rafa Usín quien pudo ampliar diferencias en el marcador a no ser porque estrelló su disparo desde los diez metros en el poste.
En los últimos minutos, Velasco situó a Rafael como portero-jugador y la apuesta dio sus frutos cuando a menos de tres para el final Ricardinho estableció el definitivo 2-2. Los interistas siguieron buscando el gol con el juego de cinco y Elisandro lo rozó en la última acción pero, al final, el reparto de puntos fue lo más justo después de lo visto en los cuarenta minutos.