(Foto: Andreu Serret | LPNSM) El conjunto de Vadillo consiguió sumar los tres puntos en su visita a tierras castellonenses. Los de Cani reaccionaron tarde en un partido donde no faltó la polémica.
Peñíscola RehabMedic perdió su imbatibilidad como local frente a un equipo, el balear, que supo jugar a las mil maravillas sus cartas y que siempre fue con ventaja en el marcador. Tanto fue así que en las primeras acciones de juego, Quintela ya adelantó a los suyos, después de un magnífico disparo desde media distancia.
Sin casi tiempo para reaccionar, y prácticamente en el segundo tiro de los visitantes, Chicho volvió a batir a un Molina que nada pudo hacer para evitarlo. Fue en ese instante cuando los de Cani empezaron a poner en marcha su maquinaria, con claras llegadas que se pudieron traducir en gol hasta el minuto 18, cuando Mauricinho convirtió un lanzamiento desde los diez metros.
Tras la reanudación, otros tres minutos de desconcierto castellonense los aprovecharon los de Antonio Vadillo para ampliar su renta. El tercero se produjo a causa de un más que discutido penalti, ejecutado por Paradynski, mientras que el cuarto lo anotó Eloy Rojas con un misil cruzado que besó la red peñiscolana después de golpear, con violencia, en el palo derecho del meta aragonés.
Con todo perdido, Albert Canillas apostó por Terry como portero jugador y recortó distancias por medio de Bagatini. Sin embargo, Chicho se nutrió de una pérdida valenciana en campo contrario para marcar, sin oposición, el sexto y sentenciar el duelo. Juan Emilio, cerca del final, insufló ilusión y esperanza a un equipo que, pese al esfuerzo y la entrega, no pudo reponerse a tiempo de un lento despertar.
Con este triunfo, Palma Futsal asciende a la quinta plaza, con 7 puntos, mientras que el Peñíscola RehabMedic desciende a la duodécima, con 3 de 12 posibles.
