El Fútbol Emotion vence al Levante, que cede el liderato, terminando en un cinco para cuatro épico y le toca aguardar para ver si está en la Copa de España. Foto: Toño de la Parra.
Digno de película y con final feliz para el Fútbol Emotion. Heroico y tremendo, contra todo y contra todos. Los aragoneses se pusieron 3-0 ante un Levante que cede el liderato momentáneamente a favor del Palma y pese a una actuación arbitral incomprensible, los granotas se pusieron a un tanto y la expulsión de Juanqui dejó un final épico, de puro orgullo y corazón. Aguantaron los locales con uno menos, en un 5 para 3 (jugadores de campo) de infarto, y ahora solo queda esperar. El Fútbol Emotion de momento está en la Copa, pero tocará aguardar cinco semanas para saber si está dentro. Incomprensible, pero no queda otra.
Entretenida, igualada y hasta en cierto punto desesperante fue la primera mitad. Tanto el Fútbol Emotion como el Levante tuvieron sus momentos de dominio, pero las defensas apenas se fisuraron en medio de un arbitraje, por decirlo muy suave, desafortunado. Cada detalle era importante, cada disparo, cada parada y cada falta. Los aragoneses no tardaron nada en decirle al Levante que le iba a plantear mucha guerra, porque a los 12 segundos Javi Alonso remató mordido un córner de forma peligrosa y, en el siguiente, Eloy Rojas le pegó al palo.
En los primeros minutos el caudal ofensivo fue notable, aunque después decayó cuando se cargaron de faltas ambos conjuntos. Iván Bernad tapó bien ante Esteban, Gallo lanzó fuera por poco de zurda y Fede hizo una palomita ante Jamur en una falta. Pero no quedó ahí, ya que el meta aragonés volvió a negarle el gol a su excompañero Esteban con un paradón, Eloy Rojas probó sin éxito y Dian Luka lanzó una volea alta.
En el ecuador del primer acto el protagonismo pasó a los colegiados mientras el Levante echó también para atrás al Fútbol Emotion. Después de alguna falta rigurosa para ambos bandos, señalaron una mano totalmente involuntaria de Juanqui, al que le golpeó el balón de un rebote de su propio cuerpo tras un despeje, lo que desató las protestas locales. Gallo, desde los diez metros, la envió muy alta.
Pero esa decisión se quedó corta ante una cesión clarísima que tampoco señalaron. Maxi Rescia corrió para evitarla y, al no llegar, Fede salvó el gol en propia en la línea. No fue señalada, lo que todavía enfadó más a los blanquiazules. Entre tanto, Esteban otra vez estuvo a punto de fastidiar a su exequipo, pero el larguero se alió con Iván Bernad. Finalmente, Eloy Rojas desniveló la balanza. El andaluz, desde la izquierda, se sacó un latigazo raso que desvió ligeramente un defensor, lo justo para que Fede no llegase.
Y en la segunda mitad, locura máxima. Pobres corazones de aquellos sufridores. Salió el Levante con otro aire del vestuario, con mucho más colmillo, con decisión. Iván Bernad detuvo con el pie un intento de Gallo mientras el Fútbol Emotion estaba atrás, esperando su oportunidad. Y llegó por partida doble en un minuto mágico.
Richi recuperó en campo del Levante, sirvió de tacón para Jamur y el brasileño definió con la puntera con sutileza. Y acto seguido, Dian Luka condujo una transición, cruzó para Retamar, prolongación para Jamur y gol después de que Fede fallara al blocar. 3-0 y el partido donde lo querían los aragoneses.
Iván salvó al Fútbol Emotion en una paralela corta definida por Tolrá, Eloy Rojas casi sentenció a la media vuelta, salvó Juanqui un gol cantado y Roger, al palo. Minutos de locura en los que el Levante pescó, ya que Roger acortó distancias un tiro cercano que se coló entre las piernas de Iván.
Fueron los mejores minutos de los granotas, que olieron sangre y Rafa Usín confirmó que había partido con un disparo con la derecha cruzado. Encuentro nuevo. Aguantó como pudo el Fútbol Emotion, aguardando que el Levante jugase de cinco, lo cual hizo a casi cuatro minutos del final.
Apenas creó peligro, pero en una acción de pillo y muy protestada por el Fútbol Emotion, Esteban se cruzó en el camino de Juanqui, que corría para hacer el cambio defensivo, y los colegiados expulsaron por doble amarilla al extremeño. Menos de dos minutos, cinco contra tres. Guion de Hollywood, a la épica. Y sí, aguantó estoicamente el Fútbol Emotion, que sacó fuerzas de donde no las había para impedir cada intentona del Levante. Ahora, a esperar a los rivales.