Empate en el Municipal de Peñíscola que no sirve de nada al conjunto castellonense (2-2) que se despide de Primera. El Burela consiguió remontar el duelo y se llevó un punto con el que sigue ocupando el puesto de playout. (Foto: Peñíscola FS)
El partido comenzó con un Peñíscola que salió a por todas sabedor de lo que había en juego. Y ya a los dos minutos de comenzar el choque, Tuli tuvo una buena ocasión que se marchó rozando la portería defendida por Edu.
La intensidad sobre el 40×20 y el altísimo ritmo de juego estaban marcando los primeros compases del encuentro. El Burela también lo intentó tras una buena combinación entre Quintela y Matamoros que salvó bien Molina. Comenzaron los movimientos en el banquillo dando entrada a Pani, Rumbo, Kevin Arrieta y Agustín Plaza, por parte de la escuadra local. En Burela saltaron a la pista Álex Diz, Giasson, Iago Míguez y Javi Rodríguez.
En el minuto cinco de juego Iván Rumbo dispuso de la ocasión más clara para los locales. Pero su disparo se marchó al lateral de la red. En la siguiente acción, Javi Rodríguez también probó fortuna y pudo sorprender a Molina, pero muy atento el portero cazó el balón.
El conjunto castellonense presionaba con mucha intensidad la circulación de balón de la escuadra naranja provocando errores en los pases. La insistencia sobre la portería gallega se hizo cada vez más efectiva. Pani, Walex y Bruno Gomes fueron los encargados de probar suerte, aunque no consiguieron materializar sus ocasiones. Si no era un jugador del Burela, era Edu quien evitaba el primero gol de la noche.
Fueron unos minutos de asedio a la meta de Edu. En otra de las ocasiones de peligro del Peñíscola, Pani se estrelló con el larguero. Respondió Matamoros con un centro al que no llegó David Pazos. Fue el primer acercamiento de peligro a la meta de Molina.
El conjunto castellonense estaba generando ocasiones más claras e inquietaba con más peligro a Edu que respondía con buenas intervenciones bajo palos. Rubén Orzáez finalizó una buena contra del Peñíscola, pero se topó con Iago Míguez.
En el minuto 15 de juego los locales encontraron el premio del gol y se adelantaron en el marcador por medio de Agustín Plaza. Tras el tanto siguieron creando ocasiones. Edu realizó una buena parada al disparo de Tuli. Los azules estaban siendo superiores y dominadores del juego. Bruno Gomes pudo marcar el segundo, pero apareció Lucho para impedir el disparo del brasileño. Sin más movimiento en el marcador se llegó al descanso.
Comenzó el segundo acto con una buena contra de los peñiscolanos que cortó David Pazos evitando el segundo. En el saque de banda, Edu realizó un paradón con el pie volviendo a salvar a los gallegos. En una contra de los gallegos, Walex apareció para desviar la ocasión de Álex Diz.
El minuto que lo cambió todo
Molina salvó a los locales realizando una buena parada al disparo de Iago Míguez. Walex tuvo una buena oportunidad, pero Edu se hizo con el balón. El partido se volvía un correcalles con ocasiones en ambas porterías.
En el minuto 29 todo cambió. Renato Escudero sigue en estado de gracia y tras una buena jugada personal por banda izquierda estableció la igualada. Golazo del jugador del Burela. Segundos después, fue Matamoros quien con un derechazo desde la frontal del área batió a Molina. El madrileño anotó el segundo para remontar el choque.
El trallazo de David Pazos se estrelló con la madera. Apretaban los gallegos en esta segunda parte que salieron con más intensidad y que apunto estuvieron de anotar el tercero. Luciano Gauna pudo empatar, pero su disparo se fue rozando el palo de la portería de Edu.
A falta de cinco minutos para el final salió Tuli con la elástica de portero-jugador. El Peñíscola lo seguía intentando con el cinco para cuatro y apoyado por su afición que no dejó de alentar a los suyos. La tuvo Rubén Orzáez para empatar, pero la salvó bien el meta del equipo gallego.
Rahali consiguió empatar el partido a falta de dos minutos para el final. Estaban siendo los últimos dos minutos más intensos del choque. Ambos conjuntos tenían claro lo que se jugaban y no daban ni un balón por perdido.
Final en Peñíscola. El conjunto local empató el partido y se quedaba sin opciones de seguir un año más en Primera División. El equipo de Carlos Sánchez se despide de la élite del fútbol sala nacional entre lágrimas, la ovación y el «volveremos otra vez» de sus aficionados. Con este empate el Burela sigue ocupando el puesto de playout.