El Fútbol Emotion vuelve a sacar la casta y la garra para superar al Industrias en una magnífica segunda mitad y depende de sí mismo para acabar entre los ocho primeros. Foto: Jorge Vicioso.
A este Fútbol Emotion Zaragoza hay que matarlo muchas veces para vencerle. No lo hizo el Industrias Santa Coloma y, como sucediera hace unos días en Pamplona, el equipo aragonés remontó en una segunda parte tremenda y depende de sí mismo para disputar la promoción por el título. El rival que viene es el Levante y fuera, todo un miura, pero que le quiten lo bailado. A luchar. Y mientras, el Industrias Santa Coloma a hacer los deberes ante Osasuna Magna y a esperar un favor granota.
La primera mitad fue, salvando unos minutos de cierta inspiración, un monólogo del Industrias Santa Coloma. Primero controló el dominio del balón y después aprovechó las prisas por empatar del Fútbol Emotion para clavar dardos a la contra. Control total del encuentro ante un cuadro zaragozano que no supo cómo encontrar la fórmula para incomodar y hacer verdadero daño.
El inicio fue toda una declaración de intenciones de los catalanes, que tuvieron varias ocasiones en las botas de Verdejo, un palo de Sepe tras romper a Eloy Rojas, otra de Cardona y, al final, en un saque de esquina, David sorprendió y anotó el 0-1. Tal era la caraja que a los cuatro minutos y medio David Marín pidió tiempo muerto.
Entonces llegaron los mejores minutos del Fútbol Emotion, que después se evaporaron para volver al plan anterior. Juanqui dispuso del primer aviso, Javi Alonso rozó el palo en una estrategia, Richi perdonó quizá la mejor en una gran salida de balón, Jamur lo intentó pero paró Borja y el propio meta hizo un paradón al zapatazo de Eloy Rojas a media altura.
Pero desde ese momentos el Industrias vio en las contras un filón de oro y consiguió otro gol, pero pudieron ser varios más. Bermusell estuvo cerca y, al final, fue Drahovsky el que aprovechó un desafortunado tropezón de Retamar siendo último hombre para hacer el 0-2. Antes del descanso no llegó el tercero de milagro en una doble ocasión y Uri Santos impidió un gol psicológico de Dian Luka tirándose a tapar con todo.
Y como en Pamplona, el Fútbol Emotion despertó en la segunda mitad con un gol de saque de esquina. Se vino arriba, creyó en el triunfo, fue a por él y entonces el que no tuvo respuesta al arreón fue el Industrias Santa Coloma. Dian Luka abrió el camino de la fe con un zapatazo a la escuadra de saque de esquina y el empentón definitivo lo dio Juanqui, que a la segunda remachó al fondo de la red el empate tras pase de Javi Alonso.
Empezó entonces un partido nuevo, de nervios, en el que se intuía que el que lograse el tercero iba a ganar. La tortilla había cambiado, la estaba cuajando el Fútbol Emotion, pero casi se la come el Industrias con un paradón brutal de Iván Bernad y una ocasión de Drahovsky que nadie se creyó cómo pudo fallar.
Y así es el fútbol sala, en 30 segundos el Fútbol Emotion dejó el partido sellado. Primero, Javi Alonso desvió con sutileza y mimo un disparo de Retamar y enseguida Eloy Rojas, aprovechando una mala salida de Borja y un balón a la olla de Retamar, anotó el 4-2 para delirio local. Con el juego de cinco el Industrias apenas generó peligro y el propio Eloy Rojas se inventó un golazo desde el córner propio para cerrar el duelo. A soñar con el playoff.