Firma invitada: David Sánchez
(Foto: Toño de la Parra | La Pelota No Se Mancha). Hay santos y santos. Luego está San Sarmiento. Omnipresente. Omnipotente. Omniparadas. Porque lo del meta, en el bautizo futsalero del WiZink Center, fue algo místico. Lejos de lo mundano, en cualquier caso. De todas todas. No solo por el descaro sino por la manera. Por las ganas. Por el corazón.
Porque Palma quiso y sí pudo en un partido que fue un desazón moral para ElPozo; que, disparo tras disparo, molía la portería balear sin fortuna alguna. Les faltaron astros alineados. Miguelines y Diablos del más atrás. Madrid fue losa para los murcianos, condenados a la eliminación sorpresiva ante el equipo quizá menos dado para ello en el torneo.
La cara es Vadillo. Primero desencajado ante la actuación arbitral que barrió desigual. Bien le costó la expulsión al que fuera ex capitán. Después, de felicidad, ya ante los medios, cuando el marcador se había resuelto a favor de los isleños.
Es el premio de un equipo cuyas sensaciones, en Liga, vagan por la zona media. Pero cuyas aspiraciones, en años finiquitados, parecían ser de otro talante. Aún así quedan los play-off. Antes, una Copa. No es baladí. Tampoco el rival que les aguarda: Movistar Inter, en plena búsqueda de la tercera en liza. Aunque los madrileños, con Ricardinho reencontrándose, Rafa Rato, entre interrogantes, y un Fútbol Sala más bien templado, no tuvieron un fácil estreno ante el siempre rocoso Osasuna Magna.
En Madrid, tras la primera jornada copera, las manos son las de Sarmiento (su santidad). Los gritos, los de los Ultras venidos de más allá del mar. La alegría compartida. La sensación de querer más.
David Sánchez (@DASanchez__)
Periodista. Co-Fundador del programa carrusel radiofónico ‘En Pista’ dedicado al Fútbol Sala (2014-2016). Pasó por el Departamento de Comunicación de la LNFS. Ha cubierto todas las competiciones nacionales y UEFA Futsal Cup. Como especialista en tenis es colaborador en varios medios, entre ellos, Radio MARCA, esRadio o Sphera Sports.
